La industria tecnológica seguirá experimentando importantes despidos hasta bien entrado 2025, lo que refleja una tendencia más amplia de reestructuración impulsada por las presiones económicas y la rápida integración de la inteligencia artificial. Más de 150.000 trabajadores del sector tecnológico perdieron sus empleos en 2024, y los recortes ya superaron los 22.000 solo en los primeros meses de este año, y en febrero se registraron la asombrosa cifra de 16.084 reducciones. Esta ola de recortes de empleos no se trata sólo de recortar costos; es un cambio fundamental en la forma en que operan las empresas, en el que la automatización y la IA están remodelando las necesidades de la fuerza laboral.
La magnitud de los recortes: un desglose mensual
Los siguientes datos ilustran el patrón constante de despidos durante los primeros diez meses de 2025:
- Noviembre 2025: 4.505 empleados despedidos.
- Octubre 2025: 18.510 empleados despedidos.
- Septiembre 2025: 4.152 empleados despedidos.
- Agosto 2025: 6.302 empleados despedidos.
- Julio 2025: 16.327 empleados despedidos.
- Junio 2025: 1.606 empleados despedidos.
- Mayo 2025: 10.397 empleados despedidos.
- Abril de 2025: Más de 24.500 empleados despedidos.
- Marzo 2025: 8.834 empleados despedidos.
- Febrero 2025: 16.234 empleados despedidos.
- Enero 2025: 2.403 empleados despedidos.
Este nivel sostenido de pérdida de empleos sugiere que el sector tecnológico está atravesando un período de corrección significativa, en el que las empresas priorizan la eficiencia sobre la plantilla. El impacto se extiende más allá de los trabajadores individuales; genera preocupación sobre los efectos a largo plazo sobre la innovación, a medida que los profesionales capacitados se ven obligados a adaptarse a un panorama cambiante.
Despidos notables a finales de 2025
Varias empresas de alto perfil han anunciado despidos recientemente, lo que indica que esta tendencia no se limita a las empresas emergentes más pequeñas:
- HP: Planes para eliminar entre 4000 y 6000 puestos de trabajo para 2028, impulsados por la racionalización de las operaciones y la adopción de la IA.
- Apple: Reducir posiciones de ventas a medida que reestructura su estrategia de ventas para clientes empresariales, educativos y gubernamentales.
- Monarch Tractor: Enfrentando un posible cierre con más de 100 despidos, lo que refleja los desafíos en el sector de los vehículos eléctricos autónomos.
- Playtika: Despide al 20% de su plantilla (700-800 empleados) en su quinta ronda de recortes desde 2022.
- Pipe: Reducir a la mitad su plantilla (200 empleados) en un esfuerzo por obtener rentabilidad.
- Synopsys: Recorta aproximadamente el 10% de su personal (2.000 empleados) tras la adquisición de Ansys.
- Deepwatch: Reducción de la plantilla (60-80 empleados) con la IA citada como un factor contribuyente.
- Axonius: Recortar un 10% de su plantilla (100 empleados) para agilizar las operaciones.
- MyBambu: Cerrar operaciones locales y despedir a los 141 empleados.
- Oracle: Rondas continuas de despidos en múltiples ubicaciones, incluidas Seattle y San Francisco, para un total de cientos de puestos de trabajo eliminados en los últimos meses.
El papel de la IA y la automatización
Un tema recurrente en estos despidos es la creciente dependencia de la inteligencia artificial y la automatización. Empresas como Just Eat, Fiverr y Paycom han citado explícitamente la IA como un factor que impulsa la reducción de la fuerza laboral. Esto sugiere que la integración de la IA no se trata sólo de mejorar la eficiencia; está remodelando fundamentalmente la demanda de mano de obra humana en ciertos roles. La tendencia plantea importantes interrogantes sobre el futuro del trabajo, incluida la necesidad de iniciativas de reciclaje profesional y redes de seguridad social para apoyar a los trabajadores desplazados.
Conclusión
Los despidos tecnológicos de 2025 subrayan un momento crucial en la industria: un cambio hacia operaciones más ágiles, impulsadas por la inteligencia artificial y la automatización. Si bien las ganancias en eficiencia son inevitables, el costo humano es sustancial. Los continuos recortes de empleo obligarán a los trabajadores a adaptarse y a las empresas a priorizar la sostenibilidad a largo plazo sobre el crecimiento a corto plazo. La situación exige atención no sólo de los afectados sino también de los responsables políticos y los líderes de la industria para mitigar las consecuencias negativas.


























